La primera vez que oí hablar de fotografía contemplativa
sentí curiosidad por esta modalidad fotográfica que no aparecía en los manuales
al uso, y que no se solía mencionar en los foros. Buscando por internet
encontré algún que otro post, algún podcast e incluso la referencia a un libro.
Ahora que tengo el libro puedo comentar con más conocimiento de qué va el asunto.
Tengo que empezar diciendo que se trata de algo más que una
modalidad fotográfica ya que supone una manera de mirar, incluso de vivir, muy
relacionada con las filosofías orientales. El concepto de atención o conciencia
plena es el que mejor se ajusta a esta forma de mirar por el visor. La conciencia plena o mindfulness no es otra
cosa que estar muy concentrado en el momento presente de manera continua
y relajada, sin juzgarlo, aceptándolo tal y como es, y sin tratar de
controlarlo, estando atento a cada uno de sus detalles y matices. En ese estado,
tu mente no se aleja de la realidad dejándose llevar por una corriente de
pensamientos que te proyectan hacia el pasado o el futuro, y haciendo que se
evapore la magia del momento presente. Simplificando, podríamos decir que se
trata de aparcar tus pensamientos y estar atento a todo lo que te rodea
manteniendo muy abiertos los sentidos: el aroma del café que estás tomando, la
luz suave que entra por una ventana, el reflejo de las luces sobre el vidrio de
la mesa, el intenso color rojo del jersey de la chica de la mesa de enfrente y
esa música relajante que pone el fondo sonoro a tu experiencia.
A que empiezas a darte cuenta de qué la va cosa. Pues sí, la
fotografía contemplativa es una forma de usar la cámara para reflejar tu estado
de ánimo, para recoger en el sensor esos detalles (sombras, reflejos, colores)
que se te suelen escapar cuando tu
percepción no está cegada por tus preocupaciones y pensamientos. Fotografías contemplativamente cuando tu visión
no está oscurecida por tus expectativas sobre si será una buena foto, ni por
tus dudas sobre la mejor técnica para tomarla, ni por tus pensamientos acerca
de la belleza del motivo.
En la fotografía convencional el tema o motivo es muy
importante para obtener fotos exitosas.
Se trata de encontrar el paisaje adecuado, capturar la emoción correcta
o mostrar de forma exacta las
condiciones sociológicas. El fotógrafo se parece a un cazador en una busca
permanente de la mejor presa. Obviamente, cada fotógrafo tiene su idea
particular de lo que resulta bello, artístico, interesante o atractivo, y busca
motivos que se ajusten a esos conceptos que actúan como filtros o moldes. Además, trata de utilizar todas las técnicas,
reglas de composición y trucos disponibles que le ayuden a acercar su foto a
aquello que va buscando. Distraída por esos filtros, técnicas y conceptos, la
visión se distorsiona y se le escapa lo más precioso, que es aquello que tiene
delante pero que no se ajusta a esos
moldes preestablecidos. El fotógrafo convencional podrá obtener una imagen
bella, impactante e incluso memorable, pero que mostrará las cosas no tal como
son sino como él quiere que sean. Serán imágenes que atraerán más al cerebro
que al corazón. Las imágenes de famosos fotógrafos como Ansel Adams o Andrea
Gursky serían buenos ejemplos de estas fotografías técnicamente perfectas pero frías
y carentes de frescura. En el otro extremo se encuentran aquellos maestros que
priorizaron en su obra la experiencia de ver. Edward Weston, Cartier-Bressón,
André Kertész o Robert Adams responderían a ese perfil de fotógrafos con una
mirada limpia y sin encorsetar. ¿Y tú qué prefieres?
Claramente me acabo de sentir identificada. Me ha parecido muy interesante lo que cuentas. La foto, qué decirte, para contemplar :-)
ResponderEliminarPues verás, como ya voy para viejo, estoy empezando a olvidarme de normas y consejos para, cada vez más, hacer lo que me apetece y si, por suerte, a alguien le gusta lo que hago pues mejor que mejor. Lo malo es que, al tiempo que esto me ocurre, me doy cuenta de que me estoy volviendo excesivamente crítico y cada vez me cuesta más ser "políticamente correcto", pero me temo que eso también es consustancial con el paso de los años. Conclusión: Haz siempre lo que A TI TE APETECE y despreocúpate de lo demás, sobre todo cuando, como en tu caso, lo haces bien. Un abrazo,
ResponderEliminarSiempre...la fotografía contemplativa, Alfredo.
ResponderEliminarSon momentos vividos que desprenden las emociones de ese instante.
Hay buenos fotógrafos pero fríos, como tu bien explicas, que usan el arte fotográfico para sacar lo mejor de si mismos y mostrar sus capacidades...a mi eso no me va, es más se nota cuando una foto tiene alma, un fondo, un instante vivido y apreciado.
Tu ya sabías que te iba yo a poner aquí... ;)
Lo que pasa es que hoy veo tu foto "mezclada", evidentemente es una foto que corresponde a una visión muy particular de un momento tuyo, pero se que si le hubieras "metido más mano" en cuestión de retoque, podría haber sido la foto convencional y artística con una enorme carga de convencionalismo creativo.
Así me gusta, si esto es lo que viste, es genial, porque desprende calorcillo y un buen momento, es evidente.
Un beso.
Como toda visión de las cosas, lo que cuentas tiene sus matices. Una foto, creo yo, siempre es contemplativa. El problema es que la cámara fotográfica, por su frialdad intrínseca, no percibe esos matices emocionales que a mí me ha provocado una imagen -y que a veces están condicionados por objetos o un ambiente específico que no queda registrado en la foto y que sin embargo forma parte del entorno-. Al hacer una fotografía puede estar sonando una música o llegándome un olor que no han quedado registrados en el fichero RAW, pero sí en mi memoria emocional. Debería ser en el procesado donde deberíamos intentar al menos reproducir esas emociones. Esto no es cosa de la fotografía digital exclusivamente. Yo recuerdo cuando revelaba en B&N en el laboratorio que intentaba buscar efectos similares. En fin, como digo, sin entrar en ningún tipo de polémicas, toda afirmación tiene sus matices.
ResponderEliminarLo que sí he de confesarte es que después de leer el texto y ver la fotografía se aprecia ese tipo de frescura que da el momento y aquello que provocó la contemplación, en este caso el reflejo, quedando el resto del encuadre como mera imagen comparsa. Un abrazo y gracias por transmitirnos este tipo de reflexiones, siempre muy interesantes.
Alfredo Es esencialmente atractivos pasear por su blog y ver sus imágenes y sus textos Feliz fin de semana Saludos
ResponderEliminarGran toma la que has logrado e interesante tu exposición.
ResponderEliminarUn abrazo y buen fin de semana.
Ramón
Buen ojo.
ResponderEliminarBonito reflejo.
Sigue contemplando.
Saludos.
Uf, muy interesante. Ya había leido cosas sobre este tema. Ayer precisamente en nuestra reunión estuvimos hablando en mesa redonda de conceptos de composición juzgandolos en la obra de grandes fotografos, concretamente con Robert Frank y su libro los americanos. Una gran velada.
ResponderEliminarCon respecto a la fotografía contemplativa pienso que es una fotografía ante todo solitaria ya que necesita que estes muy concentrado en todos esos detalles, muy contigo mismo .
Gracias por estas reflexiones que siempre vienen bien.
Me ha gustado mucho las fotos de Robert Adams...parecen "sencillas" pero no lo son y cada una de ellas me cuenta algo, un gran fotógrafo!
ResponderEliminarGracias por esta entrada, he aprendido algo y descubierto a alguien...muchas gracias!
La foto que presentas es increible...como siempre esa luz que consigues me atrapa!
buen fin de semana! A disfrutar y a disparar muchas fotos!
A mi me da la impresión que lo que nos cuentas es mucho más fácil en la teoria. Y no es una crítica, al contrario. Te agradezco mucho, como siempre, estos textos que me hacen reflexionar. Lo que pasa es que no recuerdo ningún momento en el que, a no ser por cuestiones de trabajo, haya sacado la cámara sin que fuera una emoción o una impresión lo que me impulsaba a ello.
ResponderEliminarTu texto me ha hecho pensar en lo fácil que puede resultar entender el concepto de iluminación, en el sentido más budista y menos fotográfico de la palabra, y sin embarlo en los pocos que parece que llegan a ella...
También, bajo el techo de la fotografía contemplativa se han puesto trabajos que bien merecerían quedar en la intemperie, aunque esto probablemente ya es otra historia.
Saludos, Alfredo. Gracias, y buen fin de semana.
En la entrada me he limitado a presentar una breve descripción de lo que es la Fotografía Contemplativa. Sin que ello quiera decir que sea el tipo de fotografía que más me interesa.
ResponderEliminarCreo que la mayoría de mis fotos no tienen ese carácter contemplativo. Algunos de vosotros tenéis fotos que podrían catalogarse como contemplativas, a la vez que otras muchas son más pensadas o elaboradas(como sería el caso de algunas de Remei y de muchas de Carlos).
La verdad es que no me vuelven loco las fotos de Fotografía Contemplativa que aparecen en el libro de Andy Karr y Michael Wood, que son los gurús de este movimiento. No obstante, creo que aporta una interesante forma de acercarse a la fotografía. Por otra parte, como comenta Oriol, se trata algo más fácil en la teoría que en la práctica. Al igual que ocurre con la meditación de conciencia plena, hay que dedicar mucho esfuerzo y tiempo a dominarlas. En entradas posteriores describiré con algo más de detalle las fases del proceso de fotografiar contemplativamente.
Un saludo
Interesante texto, que se acerca mucho por no decir del todo a la filosofía que desde hace años practico (practicamos en esta casa) y que tiene que ver con una mezcla de budismo y filosofía zen.
ResponderEliminarEs cierto que tendemos a pensar que somos nosotros quienes actuamos para solucionar y mejorar las cosas cuando en realidad hay que saber que solo somos útiles necesarios para que todo enganche y funciones de una determinada manera.
Puede parece que esto tiene que ver con el pasotismo, pero nada más lejos de la realidad, de lo que se trata es de conectar la mente en determinados momentos (cuantos más mejor) y dejar que la necesidad nos alcance, para saber lo que hay que hacer y a lo que hay que estar.
Un abrazo y me alegro de saber que te interesa el asunto.
Un abrazo
t
Una teoria muy interesante, aunque como muy bien especificas, la mayoria de tu obra no podria encasillarse en lo contemplativo.
ResponderEliminarYo cuando disparo, te aseguro que me desprocupo totalmente sobre a que "corriente" va a pertenecer esa imagen, es una acto total y absolutamente intuitivo. De todas maneras, siempre está bien conocer las diferentes teorias o filosofias de las cosas.
Un abrazo
Ambas miradas son válidas y hasta complementarias. La de quien quiere poner su sello y la de quien transmite de manera realista y objetiva aquéllos que contempla. Me gustaría estar liberado de todos los condicionantes que limitan o impiden dar un testimonio imparcial. Creo que ese grado de "limpieza" está reservado a un redicido grupo de fotógrafos.
ResponderEliminarEn todo caso, te agradezco enormemente aque plantees cuestiones para el debate y la reflexión, siempre enriquecedoras y didácticas.
Un abrazo.
No hay nada como un buen prisma para hacer fotos. Tu tienes buen prisma, yo que te sigo te lo digo.
ResponderEliminarUn saudo
En mayor o menos medida, considero que todo aficionado a la fotografía, termina por aprender a mirar, de hecho vemos muchas cosas que a simple vista pasan desapercibidas a los demás, y que no están escondidas, pero.....
ResponderEliminarUn abrazo.
Very beautiful - sorry for not beeing able to read the text. My best
ResponderEliminarInteresante lo que nos cuentas y las fotos como siempre impecables.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Muy interesante el texto que nos dejas Alfredo, para reflexionar sobre ello, y las fotos como te han comentado ya; estupendas, como siempre; en tu linea, un abrazo compi.
ResponderEliminarMuy rico e interesante lo que expones en el texto del post y, además, muy documentado.
ResponderEliminarY hablo de rico, como reflexivo.
Hay muchas formas y enfoques que trasladamos a nuestro ojo u objetivo y aun siendo contemplativas, hay y existen "tendencias" tantas como corrientes literarias o más y todas coexisten y para mí esta es la mayor de la riqueza de tu entrada.
Un abrazo.
Hola Alfredo, me encantan estos posts en los que cuentas todas estas cosas que yo no me entero nunca!. En mi caso diria o me quedaría con la contemplativa ya que las fotos que he tirado salvo alguna, son parte de mis sentimientos y emociones, o momentos que quiero que se queden permanentes en mi memoria. Yo no domino nada, ni de técnica, ni de encuadres ni nada de nada, simplemento tiro a lo que me gusta y si hay algo que a alguien le atrae ole parece interesante o capta el sentimiento muchísimo mejor. Es cuando entonces me digo que he podido lograr un poquito lo que quería decir. Un fuertísimo abrazo y decirte que las fotos que me he saltado estos dias que no he podido entrar son preciosas. Siempre hablan con esos cielos o esos colores que les das. Buena semana!!
ResponderEliminarUn enfoque interesante y enriquecedor. Personalmente la fotografía tiene un fuerte componente contemplativo, en cuanto a intentar recoger lo que observo, aunque sí es cierto que filtrado por lo que me inspira o me evoca.
ResponderEliminarNo hay verdades absolutas.
Saludos
Vaya, Alfredo, no sabía que existiera esta etiqueta, una más, para la fotografía. Me llama la atención porque yo de vez en cuando titulo alguna foto con la palabra "contemplativa" y otro adjetivo después, y ya tengo unas cuantas de estas. Pero en mi caso la actitud de contemplación surge después, es decir, a la vista del resultado, así que me temo mis "contemplativas" han de ser de otro género distinto.
ResponderEliminarGracias, como siempre, por dar pie a estos minoforos.
Un abrazo.
He de decir que cuando comencé hacer fotos era todo un "cazador"...buscaba la foto impactante...y prácticamente no disfrutaba de lo que me rodeaba.
ResponderEliminarTras profundizar un poquito más en este apasionante mundo y leer muchos libros y artículos, aprendí primero a disfrutar de lo que me rodea y posteriormente captarlo con la cámara...aunque me confieso que el "gen" cazador sigue muy presente.
Un artículo muy interesante amigo Alfredo.
La foto del reflejo, una obra de arte (visión excepcional, sin lugar a dudas...del mejor de los cazadores).
Un abrazo y gracias por compartir tus conocimientos.