¿Y cómo devolver a mi vida la luz
de la mañana, las lágrimas nocturnas,
el asombro del mar, los silencios del mirlo,
el tiempo de una tarde inacabable?
¿Y cómo devolver sus diferencias
al dolor y a la dicha,
y ser los dos amados por igual,
pues completan los dos el sabor encendido de la vida?
Cuando la edad es ya desventurada
y es un pétalo el día,
y apenas quedan rosas,
no es posible que el mundo pueda ser recobrado.
Acógete a unos ojos, sólo jóvenes,
y descubre con ellos el mundo que perdiste.
Y que te miren luego, para ser aún del mundo.
De El Otoño de las rosas (Francisco Brines)
de la mañana, las lágrimas nocturnas,
el asombro del mar, los silencios del mirlo,
el tiempo de una tarde inacabable?
¿Y cómo devolver sus diferencias
al dolor y a la dicha,
y ser los dos amados por igual,
pues completan los dos el sabor encendido de la vida?
Cuando la edad es ya desventurada
y es un pétalo el día,
y apenas quedan rosas,
no es posible que el mundo pueda ser recobrado.
Acógete a unos ojos, sólo jóvenes,
y descubre con ellos el mundo que perdiste.
Y que te miren luego, para ser aún del mundo.
De El Otoño de las rosas (Francisco Brines)
The light and composition are both very nice .
ResponderEliminarGreetings, Joop
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar¡Genial! No puede ocultar su inspiración
ResponderEliminarDespués de atravesar las ruinas de lo inconcluso,el horizonte es más largo,más necesario.
ResponderEliminarHopper y Brines citados en este lugar, para siempre.
Gracias por el momento.
Del todo Hopperiana, por los tonos y por el encuadre. Por todo.
ResponderEliminarUna preciosidad.
Un abrazo
"Las ventanas reflejan
ResponderEliminarel fuego de poniente
y flota una luz gris
que ha venido del mar.
En mí quiere quedarse
el día, que se muere,
como si yo, al mirarle,
lo pudiera salvar.
Y quién hay que me mire
y que pueda salvarme.
La luz se ha vuelto negra
y se ha borrado el mar".
F. Brines
Gran imagen.
Un saludo F. Arocena
La geometría de las luces. Impecable.
ResponderEliminarLa mirada del otro para ser alguien, la mirada sobre el mar desde la atalaya, el hogar destrozado pero aún abierto a la luz.
ResponderEliminarLa fotografía es magnífica!
besos,
Estas es una de esas ocasiones en las que la entrada del blog es sólo un estímulo para vuestra inspiración.
ResponderEliminarDa gusto leer vuestros comentarios.
Gracias
Puramente Hopperniana.
ResponderEliminarCasi en acuarela.
Me alegro que varios de vosotros Chapiniki, Luis Serrano, Asun y tu le hayáis homenajeado tan bellamente.
Felicidades por la toma y enhorabuena a los que os habéis acordado de él.
Un abrazo.
la elegancia de la composición no se corresponde con el estado de la casa, posiblemente por ello es tan sugerente.
ResponderEliminarla composición y la luz de lujo... lo inexplicable que una casa con esa vista esté en ese estado
ResponderEliminarImagen y texto conjuntan asombrosamente. Gracias por compartirlo.
ResponderEliminarUn saludo.
¡Qué suerte he tenido por haber encontrado éste blog!
ResponderEliminarMagníficas fotos.
Te felicito.
Bien controladas esas luces/sombras.
ResponderEliminarMuy chula.
Saludos.
Luces, sombras....equilibrio.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Alfredo! qué foto más preciosa con ese color de atardecer que con tu poema me lleba a recordar la vejez y el paso de los años. Me ha encantado junto al poema ya que lo veo relacionado en cada palabra. Un abrazo y que tengas un feliz fin de semana.
ResponderEliminarLa luz entrando por las ventanas guarda un parecido más que razonable con la obra del mejor pintor que ha traído América. Análogo aire de misterio o de introspección.
ResponderEliminarGenial!! Me gusta la luz y la sombra, y la vista al mar! un saludo cordial, Hilde
ResponderEliminarEfectivamente esa luz (y las palabras que acompañan) son muy bellas...
ResponderEliminarQue maravilla Alfredo!!! Disfruto tanto con tus fotografías y en este caso con las hermosas aplabras que la acompañan
ResponderEliminar¿No tenías una parecida, con la mujer a la izquierda? Igual me confundo.
ResponderEliminarSí, recuerda al gran Hopper.
Buen fin de semana.
En efecto, Chapi, tengo otras dos de este mismo lugar. Una en color y otra en B&N.
ResponderEliminarUn abrazo
Después de tanto comentario poco más se puede añadir. En efecto es una gran fotografía.
ResponderEliminarSaludos.
Anda, pero si ya os conocéis...
ResponderEliminarAcabo de recomendar tu blog y, en concreto esta entrada en el mío, por si no ...
Excelente composición, Alfredo. Bueno, como todo lo que haces, me gusta mucho. Felicidades.
Un abrazo.
Gracias, Asun. Pero, en efecto, soy uno de los primeros chapinkistas que se conocen.
ResponderEliminarUn saludo
¡Preciosa imagen con un encuadre genial! Saludos.
ResponderEliminarHola, Alfredo!!!
ResponderEliminarHoy he podido dedicar el día a saludar y disfrutar de los trabajos de l@s amig@s que , como tú, me siguen y apoyan incondicionalmente...muchas gracias, de verdad!!!
No dejo de admirar tus creaciones...esta es buenísima, aunque las anteriores no son para pasar por alto, me gusta especialmente "En clave de sol".
Un gran abrazo, ah...y enhorabuena por esa estupenda portada!!! ;)
Asun, doy fe de ello, de la primera entrada que hice sobre Hopper, allá por el 2010, el único comentario fue de un tal Alfredo, ¿te suena? jejejeje
ResponderEliminarAlfredo, acabo de conocer tu rincón y me ha encantado. Te enlazo a mi saloncito que, aunque no es de fotografía, adora la fotografía.
ResponderEliminarFelicidades desde Galicia.
¿Y titularla Hooperiana no es caer en el error de no estar sintiéndola?
ResponderEliminarVaya, vaya, cuantos contertulios por aquí que no quieren saber nada de mirar para adentro... :) antiguos conocidos :)
Acariciada por la luz que abandona el lugar... Quietud y sonidos calmos que se contraponen a la oscuridad que los revela... Casa abandonada... tan extraña... y al lado del mar... si, tan extraño...
Ventanas que quieren encerrar la libertad que de ellas se aleja...
Compartiendo en el mundo en armonía...